La aventura de Cecilia y el Dragón
ISBN: 84-96173-25-9
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Lawrence Schimel ha publicado más de 70 libros de diversos géneros, ensayo, novela, relato, poesía, sin dejar de lado el mundo gay que reivindica a través de la literatura con títulos como 'Dos chicos enamorados', 'Vacaciones en Ibiza' o 'Bien dotad'o. Escribe en inglés y en castellano y su obra ha sido traducida al alemán, catalán, checo, esperanto, euskera, finlandés, gallego, griego, holandés, indonesio, italiano, japonés, polaco, portugués, rumano, ruso y eslovaco. Ha sido librero en la librería infantil de Nueva York Books of Wonder y coordina la sección española de la Society of Children´s Book Writers and Illustrators.
Con la dibujante Sara Rojo, una artista que trabaja con infinidad de técnicas y medios y ha ilustrado numerosos libros infantiles además de colaborar en periódicos y revistas, Schimel ha formado un tándem casi perfecto. Juntos han creado muchos títulos infantiles, como 'La golondrina peregrin'a, con motivo del año santo jacobeo, 'No hay nada como el origina'l, o 'Misterio en el jardín'.
'La aventura de Cecilia y el dragón' es una historia en la que la ironía está presente en cada página. El dragón es malo y tontorrón, muy diferente a los de su especie que son malos y listísimos. Cecilia, sin embargo, es tan lista que consigue engañar al fiero y bobo animal. Casi el mundo al revés, como aquella canción que cantaba Paco Ibáñez, con texto de José Agustín Goytisolo: "Érase una vez un lobito bueno, al que maltrataban todos los corderos. Había también un príncipe malo, una bruja hermosa y un pirata honrado".
Cecilia tendrá la aventura que tanto desea: ver a un dragón. Pero como no es una princesa ni cuida gansos, (las dos profesiones, según Schimel que en los cuentos permiten enfrentarse a tan tremendo bicho), lo tiene difícil. Como se aburre mucho en su casa, dándole a la rueca todo el día, comienza a darle al magín para poder encontrarse con tan mágico animal. Cecilia tiene un sentido práctico que no se puede aguantar, hasta piensa ponerse una armadura para que el dragón crea que es un caballero y se enfrente a él... Pero luego lo piensa mejor y desiste de la idea porque seguro que se va a asfixiar ahí dentro y además no va a poder con el peso de ese corpachón de hierro...Cecilia vivirá finalmente su aventura con el dragón, muy machista según su opinión, y salvará a Miranda de sus garras, con lo que ganará una nueva amiga para no aburrirse....