El obispo guerrero
ISBN: 9788410217010
- Escribe un comentario
Paga de forma segura en nuestra tienda con tarjeta, transferencia o contrareembolso
Realizamos envíos a todo el mundo. Selecciona tu forma de envío en el proceso de compra.
Dispones de 15 días para tramitar cualquier devolución. Consulta condiciones.
Podrá el lector disfrutar de la lectura amena de las dos obras que reúne Miguel Galindo en este libro, fruto de su destreza literaria y de su capacidad de evocación a través de la palabra de hechos y acontecimientos que fueron fundamentales en nuestra historia, en la historia de nuestra Región y de la ciudad y la huerta de Murcia. Se trata de un romance de ciego y de una comedia escritas con una calidad expresiva admirable y sobre todo con un eficaz dominio de los secretos del romance narrativo y de la comedia histórica. Porque, desde luego, los hechos históricos sobre los que estas dos obras literarias se apoyan evidencian al mismo tiempo la riqueza de la imaginación del autor, que logra que realidad y ficción funcionen una vez más hasta conseguir un producto literario convincente y de calidad. Miguel Galindo explica detalladamente en sus Palabras del autor las circunstancias que provocaron que escribiera este romance de ciego y esta comedia en torno a los sucesos de trascendencia nacional e internacional que tuvieron lugar en la huerta de Murcia, en las proximidades de la ciudad, en septiembre de 1706, con motivo de la célebre batalla del Huerto de la Bombas, fundamental en el desarrollo de la Guerra de Sucesión y del triunfo de la facción borbónica en España y el afianzamiento en el trono del bisnieto de Felipe IV y nieto de Luis XIV, el duque de Anjou y rey de España Felipe V. El lector podrá reflexionar sobre el clásico y tradicional enfrentamiento entre la realidad y la ficción, que en este caso no lo es tanto sino más bien simbiosis y feliz conciliación de lo que ocurrió con lo que pudo ocurrir. Lo indica el propio autor en sus palabras cuando afirma que es evidente que los hechos históricos no ocurrieron tal como los cuenta la comedia, pero bien es cierto que el plano ficticio ha sido engranado lo mejor posible al plano real para obtener una obra que divierta y enseñe o, al menos, invite a acercarse a lo ocurrido en aquella famosa batalla.