Alberto de Casso propone en La carretera de los huesos y siete piezas automovilísticas más un mosaico de viajes interrumpidos por el accidente que tienen como nexo el encuentro con la muerte y con uno mismo. Desde una escritura ligera, coloquial, pero al mismo tiempo reflexiva, las piezas se desarrollan empujadas por el vértigo y el flujo imparable de los acontecimientos.
« Lo que nos propone Alberto de Casso en este conjunto de piezas breves es una polifonía de viajes —o de voces—. Una tipología de los viajes a ritmo de mariachis, boleros y humor negro; de las historias que se ocultan en el interior de un coche, lugar de confesión —más bien, no-lugar—, espacio testigo de los momentos más sublimes, pero también de los más patéticos ». Del prólogo de Ruth Gutiérrez
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