Tres pedradas

A veces me siento como un frigorífico desenchufado, unplugged, con un pepino podrido dentro. A veces me siento como ese mechero que no tiene gas pero que no tiras nunca y sigues intentando encenderte los cigarros con él y sabes que no tiene gas.

¿Sabes cómo me siento a veces?

A veces me siento como un gorila depilado, con la cabeza amueblada de IKEA.

Y a veces me siento como un espejo delante de otro espejo, como el traje de boda de un muerto colgando en un armario en una casa vacía.

Como el Hombre Elefante dado la vuelta.

Como un cartel de fiestas del año anterior.

Como el análisis de orina de un niño de Chernobil.

Pero hoy me siento bien, bastante bien.