Cultura, desarrollo y territorio

La cultura es un elemento central en la conformación del territorio, a la par que este condiciona, caracteriza, la vida cultural de una población.
La gestión cultural se ha convertido, por tanto, en una herramienta de gestión territorial y de desarrollo local más allá de su propio impacto cultural, pero también es un marco conceptual para la reflexión estratégica.
La interdisciplinariedad ha dado paso, en el análisis y gestión de la complejidad social, a la visión "red" y así incorpora conocimientos, instrumentos, técnicas y fundamentalmente organizaciones, ideas y personas en un nuevo pensamiento global (en su concepto genuino más allá de la acepción de transnacionalidad) del desarrollo local.
Así las políticas culturales toman una merecida mayoría de edad junto a las de ordenación del territorio y las políticas económicas en la determinación de una triada "caleidoscópica" rica en matices y posibilidades de interacción.